El juego es muy importante para llegar a ser un gato adulto. La madre
de los gatitos ya enseña a sus bebes en las primeras semanas de su
vida, cómo adquirir habilidad, inteligencia así como interactuar con
otros animales y con humanos. A los gatitos les gusta mucho jugar y los
juegos son muy importantes para el desarrollo de los gatitos. De esta
forma aprenden a acercar cautelosamente, cazar, capturar o, dicho en
general, todas las habilidades necesarias en el coto de caza.
Jugar con el gatito consolidará el aprecio y la simpatía mutua. Una hora de juegos regular
hará un gato más feliz, seguro de si mismo, curioso y emocionalmente más
estable.
Tipos de juegos:
- El salto de botín: El gatito se oculta detrás de un objeto o en el césped, se acerca y
hace un salto para capturar el botín. Muchas veces, la cola de la mamá o
la de uno de los hermanos puede ser el botín pero también cualquier
objeto inanimado puede ser la meta del ataque.
- El matamoscas: Parecido al salto de botín el gato se acerca a su víctima.
Adicionalmente al salto, el gatito pega con la pata delantera para
narcotizar el botín antes de matarlo. Se puede observar este
comportamiento si balancea un objeto fijado con un hilo.
- La paleta de pescado: En este juego el gato encuentra un objeto inanimado en el suelo. A
continuación mueve su pata delantera de forma que lo tira sobre su
hombro y salta al objeto como si fuera un pescado que hubiera pescado
del agua y que intentara rebotar al agua.
- La batalla ficticia: En la batalla ficticia los pequeños gatitos luchan el uno contra el
otro. Es uno de los primeros juegos que aprenden y los gatitos ya
empiezan a jugar este juego a la edad de tres semanas. Casi no pueden
herirse durante este juego pero aprenden a maniobrar sus movimientos y
la interacción social se consolida.
Un estudio realizado por la Universidad de Carroll
(Wisconsin) encontró que los propietarios de los gatos sacaban más
puntuación que los dueños de perros en un test de inteligencia.La investigación ha demostrado que los propietarios
de los dos animales tienden a tener diferentes personalidades, los
propietarios de los gatos son más sensibles y de mente abierta mientras
que los propietarios de los perros son más enérgicos.
Los amantes de los perros tienden a ser más enérgicos y extrovertidos que los dueños de los gatos y siguen las reglas de forma más obediente, informó Live Science.
Un
total de 600 estudiantes hicieron una encuesta para revelar sus rasgos
de personalidad y se les pidió que tenían que ser amantes de perros o
gatos.Cerca del 60% se identificó como amante de los perros, alrededor de
seis veces más del número de estudiantes que dijeron que les gustaban
los gatos. Cerca de un tercio de los encuestados afirmaron que les
gustaba o disgustaba por igual tanto los perros como los gatos.
El profesor Guastello piensa que la gente puede elegir una mascota en
base a su propia personalidad, las personas enérgicas se ven atraídas
por las mascotas enérgicas como los perros.
Mientras el estudio puede parecer como algo divertido, los resultados podrían ser utilizados para
mejorar
la eficacia de la terapia con animales con el fin de tener mejores
resultados en las relaciones entre animales y personas.